martes, 5 de diciembre de 2017

Preguntas y respuestas Facim: Ayuda con la repetición de patrones desastrosos en mi vida

Pregunta#313: Recientemente me he dado cuenta, lo cual ha sido algo impactante, que los eventos ocurridos en mi vida hace unos cinco años ---pérdida de amistades, trabajo, hogar--- parecen estar sucediéndome otra vez, de la misma forma, en circunstancias similares. Todo parece estar desmoronándose.
No deseo pasar de nuevo por todo esto, porque lo que siguió a esos cinco años fue el período más sombrío, solitario y pobre de mi vida. Siento que soy la víctima de un timo gigantesco, que no parece que pueda hacer nada para evitarlo y me siento aterrorizado. Al parecer mi ego está tratando de protegerse a sí mismo aumentando la intensidad de su ataque masivo y evitar así que lo abandone al crear malas circunstancias en mi vida. ¿Hay algo que yo  pueda hacer para detener lo que está ocurriendo? Acerca de la primera vez que me ocurrió, un amigo me ha comentado que quizás yo tendría que haber elegido seguir un camino en concreto pero que no lo hice y que por eso, se repiten mis circunstancias para que ahora si pueda hacer la elección correcta. Quizás estoy exagerando esta vez, pero si todo vuelve a desmoronarse y no puedo hacer nada para cambiar eso, seria ideal tener algo de paz interior mientras esto esté ocurriendo.

Respuesta:  No mencionas si eres estudiante o no de Un Curso de Milagros, pero el presentimiento que tienes acerca de que podría ser tu ego el que esté detrás de todo esto sugiere que tienes un conocimiento no superficial de los principios del Curso. El Curso mismo nos dice que “las pruebas por las que pasas no son más que lecciones que aún no has aprendido que vuelven a presentarse de nuevo a fin de que donde antes hiciste una elección errónea, puedas ahora hacer una mejor y escaparte así del dolor que te ocasionó lo que elegiste previamente” (T.31.VIII.3:1). Pero el Curso siempre nos está hablando acerca del contenido de nuestra propia percepción de otros, y del dolor que esos juicios nos ocasiona, y no de la forma específica de los eventos que aparentan suceder en nuestras vidas. Y no hay nada en el Curso que te diga que debes repetir el ciclo de sufrimiento y de dolor hasta que ya hagas las cosas correctamente, al estilo de una deuda kármica a ser pagada. Esto puede ser cierto dentro del sistema de pensamiento del ego, pero el propósito al completo del Curso es poner de manifiesto la demencia del ego, para que entonces podamos hacer la elección en favor de la cordura y en contra de ése sistema de pensamiento.
¿Qué es entonces lo que ha de hacerse? Lo que todos tenemos que aprender a hacer, es volvernos conscientes de nuestra propia decisión interna de vernos a nosotros mismos como culpables pecadores merecedores de castigo a causa de todas nuestras transgresiones, comenzando por nuestro supuesto ataque contra nuestro Padre Quien únicamente extiende Su Amor a todos nosotros. Es cierto que muy en el fondo creemos haber atacado el amor, pero es necesario que lleguemos a ser conscientes de esa creencia para que podamos entonces dudar de su validez, al igual que todo el dolor y el sufrimiento que esa creencia trae consigo. No existe la inevitabilidad en los eventos de nuestras vidas. Y aún más, es igualmente inevitable la interpretación que le daremos a esos eventos en nuestra vida; es decir, podríamos sentirnos víctimas por lo que aparenta estarnos  ocurriendo, pero esa interpretación de victimismo no es otra cosa que eso, una interpretación. Y si estamos dispuestos a aceptar el rol que tenemos al haberle dado esa interpretación a los eventos externos, entonces podemos unirnos con Jesús y permitirle que nos ofrezca una interpretación diferente en la que nadie es culpable, incluyendo por supuesto, a nosotros mismos.
Así que, si puedes comenzar reconociendo que es tu ego el que está abanicando tus miedos acerca del futuro, basado en una premisa defectuosa acerca de ti, puedes entonces comenzar a preguntarte si deseas seguir escuchando ésa voz. Ya que la voz del ego no le desea el bien a nadie (T.15.VII.4:3). Pero existe otra Voz, una vez que dejas a un lado la del ego, cuya única voluntad para ti es tu perfecta felicidad (W.pI.101).

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